Abril 4 de 2021 - Llamado de Jesús de la Misericordia a Su Pueblo Fiel. Mensaje a Enoch. “Pueblo mío, mi Paz sea con vosotros. Hijos míos, días aciagos estáis ya viviendo, las malas noticias os acompañarán por vuestro paso por el desierto de la purificación. Soy vuestro Jesús de la Misericordia, que con los brazos abiertos espera el regreso de las ovejas perdidas. Corred hijos pródigos, no dejéis para el último momento vuestra conversión, porque quizás ya no podréis alcanzar la Barca de mi Misericordia. Nunca antes se había visto tanta maldad y tanto pecado en la tierra, como sucede con esta generación de estos últimos tiempos; pecado y maldad que atemoriza hasta los mismos infiernos. En esta generación es donde más almas se han condenado y seguirán condenándose por el modernismo, la apostasía, y ante todo por el alejamiento de Dios. A medida que pasan los días la maldad y el pecado se intensifican, pecar se volvió una costumbre para esta humanidad ingrata. Es por esto, que estoy derramando mi Misericordia más abundantemente, esperando que la inmensa mayoría de la humanidad despierte y vuelva al Amor y Misericordia de Dios. Me duele y entristece ver cómo las generaciones que van naciendo y creciendo vienen ya marcadas con el sello de la maldad y el pecado; la falta de amor y de caridad de los hombres de estos últimos tiempos, es una afrenta a mi Amor y Misericordia. Los valores morales y espirituales están en decadencia por la falta de amor, diálogo, comprensión y ante todo por la falta de Dios en la mayoría de los hogares y familias. Sufro viendo esta realidad en muchas familias de hoy, donde los pastores del hogar no están asumiendo con responsabilidad y compromiso, el don sagrado de amar, guiar y educar a sus hijos, conforme a la enseñanza y cumplimiento de mis Santos Preceptos. Mi Decálogo de Amor es olvidado y quebrantado a diario por la inmensa mayoría de la humanidad; es por esto, por lo que los hogares, familias y sociedades, hoy van a la deriva. La falta de amor y de Dios, en el corazón de esta humanidad es la causa de la decadencia moral y espiritual. Mis Santos Preceptos son el Decálogo de Amor, son la Ley que Dios os dio para que pudierais vivir en armonía con El, y con vuestros hermanos. El no cumplimiento de mis Preceptos es el causante hoy, de tanta maldad, pecado e injusticia. ¡Volved a Mí, humanidad ingrata y pecadora; retomad pastores de mi Iglesia y pastores del hogar, la enseñanza y cumplimiento de mis preceptos; para que el pecado y la maldad, dejen de reinar en este mundo! Humanidad pecadora, soy vuestro Jesús de la Misericordia, que espera por vosotros hasta la consumación del último segundo; os estoy esperando con mis brazos abiertos, porque bien sabéis que no quiero veros morir eternamente. ¡Apresuraos, porque los segundos de mi Misericordia se están agotando; y lo que viene después de mi Aviso y Milagro, es mi Justicia y ella, no conoce de misericordia. Hijos pródigos no temáis, si os arrepentís de corazón de vuestros pecados y volvéis a Mí, os aseguro que os perdonaré y no volveré a recordar vuestros pecados por muy grandes que estos sean. No olvidéis que soy más Padre que Juez; corred pues, para que podáis alcanzar la Barca de mi Misericordia. Vuestro Padre, Jesús de la Infinita Misericordia. Dad hijos míos a conocer mis mensajes de salvación, a toda la humanidad.”

April 4, 2021 - Call of Jesus of Mercy to His Faithful People. Message to Enoch. “My people, my Peace be with you. My children, dark days you are already living, the bad news will accompany you through your passage through the desert of purification. I am your Jesus of Mercy, who with open arms awaits the return of the lost sheep. Run prodigal children, do not leave your conversion until the last moment, because perhaps you will no longer be able to reach the Boat of my Mercy. Never before has so much evil and so much sin been seen on earth, as is the case with this generation of these end times; sin and evil that frightens even hell. In this generation it is where more souls have been condemned and will continue to be condemned by modernism, apostasy, and above all by estrangement from God. As the days go by, wickedness and sin intensify, sinning became a habit for this ungrateful humanity. This is why I am pouring out my Mercy more abundantly, waiting for the vast majority of humanity to wake up and return to the Love and Mercy of God.It hurts and saddens me to see how the generations that are being born and growing are already marked with the seal of evil and sin; The lack of love and charity of the men of these last times is an affront to my Love and Mercy. Moral and spiritual values ​​are in decline due to the lack of love, dialogue, understanding and above all due to the lack of God in most homes and families. I suffer seeing this reality in many families today, where the shepherds of the home are not assuming with responsibility and commitment, the sacred gift of loving, guiding and educating their children, in accordance with the teaching and fulfillment of my Holy Precepts. My Decalogue of Love is forgotten and broken daily by the vast majority of humanity; This is why homes, families and societies are adrift today. The lack of love and of God, in the heart of this humanity is the cause of moral and spiritual decay. My Holy Precepts are the Decalogue of Love, they are the Law that God gave you so that you could live in harmony with Him, and with your brothers. The non-fulfillment of my Precepts is the cause today, of so much evil, sin and injustice.Come back to Me, ungrateful and sinful humanity; take up pastors of my Church and pastors of the home, the teaching and fulfillment of my precepts; so that sin and evil cease to reign in this world! Sinful humanity, I am your Jesus of Mercy, who waits for you until the consummation of the last second; I am waiting for you with my open arms, because you know well that I do not want to see you die eternally. Hurry, because the seconds of my Mercy are running out; and what comes after my Warning and Miracle is my Justice and she knows no mercy. Prodigal children, do not fear, if you repent from the heart of your sins and return to Me, I assure you that I will forgive you and I will never remember your sins no matter how great they may be. Do not forget that I am more Father than Judge; run then, so that you can reach the Boat of my Mercy. Your Father, Jesus of Infinite Mercy. Give my children to know my messages of salvation, to all humanity. "